LA IRUÑA JAZZ BRASS BAND CIERRA EL SPRING LINDY WEEKEND 2019 CON UNA MULTITUDINARIA SECOND LINE POR LAS CALLES DE PAMPLONA.
Días antes de este evento hablábamos con los organizadores, Andrés y Helios de Big Kick y no nos podíamos imaginar la transcendencia y la cantidad de público que asistió al evento.
El tiempo fue inmejorable para un mes de marzo en Pamplona.
Días atrás habíamos anunciado el evento en nuestras redes sociales al igual que los aficionados al lindy hop y los organizadores habían hecho lo propio.
Este es el cartel que preparamos:

El Spring Lindy Weekend es un festival de baile en torno al swing, con workshops y conciertos que atrae a bailarines de todo el mundo y numeroso público y aficionados.
Habíamos quedado a las 13:00 en la plaza de Baluarte con los bailarines. Una vez finalizadas sus clases, se unirían a nosotros en second line. El tiempo acompañaba y la gente se iba acercando poco a poco a la plaza.
Tras 15 minutos la plaza estaba a rebosar.
Tocamos dos o tres temas para calentar motores y la gente empezó a animarse.
Cuando decidimos poner en marcha la Second Line había tantos bailarines y gente acompañándolos que era difícil divisar el final de la second line.

La second line avanzaba con fuerza y el público bailaba e interactuaba con cada señal y guiño de la banda. Subimos por el paseo Sarasate hasta llegar al monumento de los fueros.

Después continuamos por la calle comedias y al entrar en la calle el sonido se amplificaba y la banda estaba en lo más alto de la second line. La gente bailaba y vibraba al son del célebre “Do Watcha Wanna”que popularizara la Rebirth Brass Band.

En la esquina de la calle nueva con la Calle San Nicolás hicimos una pequeña parada para reponer fuerzas.

La calle era un auténtico hervidero de gente y la banda avanzaba con fuerza hacia la plaza de san Nicolás. A la altura de la plaza junto a la Iglesia de San Nicolás, tocamos unos temas para que los bailarines pudiesen bailar en parejas.


Nos dirigimos a la plaza del Castillo donde los bailarines continuaron bailando al son de la Iruña Jazz Brass Band Antes de llegar al punto final del recorrido llegaba la foto de familia que quedará para la historia.

Tras la foto rumbo a la última parada al final de la calle Estafeta.

Nadie quedaba indiferente al paso de semejante marea de música y baile.

Y llegó el fin de fiesta, pero no sin antes realizar una auténtica descarga de música de New Orleans, y mucho swing.

Un auténtico éxito que agradecemos a los organizadores. Larga vida al Spring Lindy Weekend.